Nueva metedura de pata de la Cospedal, esta vez ha sido en FITUR que es el escaparate donde vender las bondades y recursos naturales de la provincia de Cuenca.
Si hay algo que nos molesta a los conquenses, esto no es otra cosa que los turistas pregunten por las “casas colgantes”, en vez de por las Casas Colgadas. Tanto es así, que la sede conquense del PP ha recibido un aluvión de protestas pidiendo a Cospedal que rectifique sus palabras (“es una ciudad acogedora y en una ciudad que es absolutamente un encanto, como lo son sus casas encantadas y sus casas colgantes”) y visite más a menudo Cuenca para conocer su realidad y las Casas Colgadas, uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad que exhiben sus balconadas de madera sobre la hoz del río Huécar.
Y es que en Cuenca, nos tomamos muy a pecho nuestros iconos urbanos como las Casas Colgadas o la Ciudad Encantada, empiezamos a estar cansados de los continuos lapsus de Cospedal cuando habla de nuestra ciudad Patrimonio de la Humanidad, puesto que no es la primera vez que confunde términos y lugares, como cuando dijo que Alfonso X había reconquistado la ciudad en lugar de Alfonso VIII, nombre que reciben calles, institutos, centros culturales y otras instituciones conquenses, que tienen a este monarca en una alta estima, como lo prueba las populares fiestas de septiembre dedicadas en su honor.
Pero lo que es más grave de este “desconocimiento” es el cómplice silencio del alcalde del PP de Cuenca, Francisco Pulido, y de la presidenta de este partido en la provincia, María Ángeles García, que acompañaban a Cospedal y que no fueron capaces de rectificarle, “por temor a ser expedientados”.
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