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Salvad al soldado Casado

La realidad política es cambiante, frenética diría yo. 
Ayer la oposición recibió una más que necesaria cura de humildad. 
Y es que el PP calculó rematadamente mal. La estrategia electoral centrada en el ataque frontal al gobierno de España les puso en un brete. No pensaban que el gobierno se defendiera con tanta contundencia de sus infaustas acusaciones. Mediante una paz no firmada, el PP propuso una entente cordiale con la extrema derecha para fustigar, vilipendiar y humillar, no a Pedro Sánchez, sino al gobierno en su totalidad. 
Casado estuvo dispuesto a demoler cualquier puente de entendimiento en aras de su propio rédito electoral. 
La fórmula era clara: asediar al gobierno con toda clase de insultos y mentiras, pues todo estaría justificado para poner en la difícil tesitura al gobierno de tener que pasar por el aro. 
No es que el PP buscase la reprobación del gobierno, es que la estrategia de Casado tenía como fin crear la falsa impresión de que él si sabría lo que hacer. 
 Pero todo este plan tan bien calculado se vino abajo con una frase lapidaria y certera de la portavoz del PSOE, Adriana Lastra; "Si tienen la lengua larga, deben tener el lomo muy duro"
Y en ese preciso momento Casado se dio cuenta que el plan fracasaba estrepitosamente. 
No tardó su aliado de la extrema derecha de poner tierra de por medio con el PP. En las redes sociales el partido ultra-derechista cargó con violencia al socio que había sido humillado en las cortes. 
Y la puntilla se la puso Ciudadanos al apoyar los decretos del gobierno de España y ofreciendo su lealtad. 
Asediado ahora el PP, tanto por la derecha como por el centro, Casado se queda en la más absoluta de las soledades y en tierra de nadie. 
Difícil situación para el PP que ahora debe demostrar si es un partido serio y coherente o un partido que definitivamente se tira al monte. 
Y por incomprensible y extraño que parezca, a Casado solo le queda el PSOE para su salvación. 



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