En nuestra mano estará apostar por el cambio tranquilo y razonable, por el progreso y el avance de Cuenca, por la dinamización de la economía local

Pasan los días, los meses, los años y Cuenca sigue igual, igual de paralizada por la inercia y la ausencia de gestión del alcalde y de su equipo de gobierno.
Que todo eso iba a acabar muy mal, muchos ya lo sabíamos, que la elección de Pulido como alcalde sería un lastre para Cuenca, lo sabíamos, que las finanzas municipales iban a ir a pique, lo sabíamos..

Sabíamos que Pulido iba a ser un lastre para Cuenca y además el tiempo nos ha dado la razón.La parálisis es un hecho consumado y las cuentas públicas se deterioran día a día.
Muchos nos preguntamos a cuanto vamos a tocar para sanear las cuentas municipales, conquenses, poneos en lo peor, los impuestos han subido y van a subir en los próximos años y los servicios municipales van a menguar, esa es la triste y cruda realidad.

El legado de Pulido y del PP no puede ser más devastador, deudas, despilfarro y mal gobierno son la funesta herencia que va a lastrar el progreso y desarrollo de Cuenca en los años venideros.
Pero hay esperanza, pronto son las elecciones municipales y podemos revertir la situación a la que nos ha conducido Pulido y el PP, debemos votar en consecuencia y poner a esta "TROPA" donde merecen estar, en la oposición.
El PSOE de Cuenca ya tiene candidato a la alcaldía, Juan Ávila, presidente de la Diputación provincial y excelente gestor como lo acredita su brillante gestión en dicha institución, la cual, ha obtenido superavits económicos.
Juan Ávila, es hoy la tabla de salvación que Cuenca necesita, una persona formada, inteligente y honrada, tengo claro que Cuenca no aguantará cuatro años más de gobiernos populares que se han demostrado como un verdadero cáncer para el bolsillo para los conquenses.
En nuestra mano estará apostar por el cambio tranquilo y razonable, por el progreso y el avance de Cuenca y por la dinamización de la economía local y el desarrollo.